Una llamada, un cerco y un apoyo aéreo que marcó el resultado
00:00 – La alerta. Una víctima reporta al 123 el hurto de su camioneta en la calle 106 con carrera 22. El Centro de Comando georreferencia el punto y distribuye la información a cuadrantes cercanos con características del vehículo y del hecho.
00:03 – El cerco inicial. Unidades en tierra realizan cierres sobre avenidas de salida hacia la Autopista Norte y rutas alternas. Se priorizan intersecciones con retornos y puentes para reducir maniobras evasivas.
00:05 – Apoyo aéreo. Despega el helicóptero Halcón para sostener la visual nocturna del objetivo. La cámara estabilizada transmite al despacho y guía desplazamientos de patrullas, evitando persecuciones desordenadas.
00:08 – Contacto visual. El automotor es identificado en la Autonorte. Se asignan binomios de tránsito y cuadrantes para alternar relevos y evitar riesgos a terceros. La guía aérea corrige en tiempo real desvíos del objetivo.
00:11 – Cierres escalonados. Con la ruta definida, patrullas ejecutan bloqueos en puntos críticos. La coordinación reduce la velocidad del objetivo y anticipa movimientos hacia retornos.
00:14 – Intervención. El vehículo es interceptado sin lesiones reportadas. Dos personas son capturadas y se recupera la camioneta. Se verifica número de chasis, placas y posibles alteraciones.
00:20 – Cadena de custodia. El automotor y los elementos materiales probatorios son puestos a disposición de la autoridad competente. Se activan actos urgentes y entrevistas a testigos.
00:40 – Diligencias finales. Se realizan verificaciones de antecedentes y se indaga si los detenidos tendrían relación con otros hechos de hurto de automotores en corredores del norte de la ciudad.
El dispositivo funcionó por tres factores: denuncia oportuna, cierre perimetral y apoyo aéreo para orientar intercepciones con menos riesgo. En corredores como la Autonorte, la combinación de tránsito y cuadrantes permite cierres más limpios y controles en puentes y retornos.
Tras el resultado, autoridades locales anunciaron continuidad de patrullajes mixtos en horas nocturnas y focalización en tramos con mayor incidencia reportada por la ciudadanía. El caso se convierte en referencia operativa para afinar protocolos urbanos de respuesta.
La cronología del operativo en Usaquén confirma que la coordinación interinstitucional reduce ventanas de fuga y eleva la probabilidad de recuperación del bien. La investigación penal deberá trazar conexiones y cerrar circuitos de receptación.
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