Fechas clave y consecuencias deportivas, legales y sociales.
Barcelona, 2025.
31 de diciembre de 2022 / 1 de enero de 2023. Una joven denuncia una agresión sexual en el baño de la discoteca Sutton (Barcelona). Se inician diligencias médicas y policiales.
20 de enero de 2023. Detención de Dani Alves e ingreso en prisión provisional por riesgo de fuga y contradicciones en su declaración.
22 de febrero de 2024. La Audiencia de Barcelona dicta condena a 4 años y 6 meses por agresión sexual, con atenuante de reparación del daño. Se imponen indemnización y medidas de alejamiento.
20–25 de marzo de 2024. La Audiencia acuerda libertad bajo fianza de 1 millón de euros; el 25 de marzo, Alves sale de Brians 2 con retirada de pasaportes y control semanal.
28 de marzo de 2025. El TSJC revoca por unanimidad la condena y absuelve: aprecia déficits valorativos en la sentencia y mantiene la presunción de inocencia. Quedan sin efecto las cautelares.
7 de mayo de 2025. La Fiscalía presenta recurso de casación ante el Tribunal Supremo, alegando valoración “no racional” de la prueba y afectación a la tutela de la víctima.
Impacto deportivo. La detención y la condena supusieron la ruptura contractual y el alejamiento del futbolista de la élite. Tras la absolución, no hay señales de retorno competitivo inmediato: pesa la incertidumbre judicial y el desgaste reputacional.
Impacto jurídico. El caso reaviva el debate sobre estándares probatorios en delitos sexuales con testimonio único. La Audiencia halló prueba bastante; el TSJC, no. El Supremo decidirá si la motivación del TSJC se ajusta a doctrina o si es preciso revisar la valoración.
Impacto social. Colectivos feministas alertan de un mensaje desalentador para denunciantes; juristas recuerdan que sin certeza probatoria no cabe condena. La conversación pública exige pedagogía y acompañamiento a víctimas, a la par de garantizar derechos del acusado.
Qué puede pasar ahora. Si el Supremo inadmite o desestima la casación, la absolución quedará firme. Si estima el recurso, puede ordenar nueva valoración o fijar criterios que afecten a causas similares. Hasta entonces, el expediente permanece en suspenso.
La defensa celebró el fallo; la acusación particular y la Fiscalía criticaron la “crueldad” del razonamiento con la víctima. El caso se transformó en una referencia para cursos, seminarios y análisis sobre prueba y comunicación judicial.
Tres años de giros han convertido este expediente en un barómetro de cómo España entiende la justicia penal en delitos sexuales. A la espera de la decisión en Madrid, todas las miradas siguen puestas en la casación.
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