Monumentalidad y control social como lenguaje universal.
En el panorama global de las primeras ciudades, Shimao irrumpe con atributos contundentes: murallas de piedra, barrios jerarquizados y rituales de sacrificio. El nuevo estudio genético la coloca en diálogo con Taosi y Liangzhu, pero también con centros de Mesoamérica y del Mediterráneo, donde parentesco y arquitectura legitimaron el poder.
Los datos muestran continuidad genética local, contactos con el norte (Yumin) y señales del sur asociadas a la expansión del arroz. Todo ello, sin reemplazo poblacional. El resultado es un “cosmopolitismo sin mestizaje” que explica por qué el comercio dejó huella material, no genética.
La escala de Shimao (~4 km²) rivaliza con asentamientos clave del Neolítico tardío asiático y destaca por la piedra como material de poder. La planificación y la estratificación funeraria sostienen la lectura de “protoestado”.
Los cementerios dobles y las categorías de tumbas evidencian instituciones tempranas: distribución del prestigio, control de recursos y rituales que refuerzan autoridad.
Más de 80 cráneos en la Puerta Este integran un repertorio ritual que, como en otros mundos, convierte la violencia en mensaje político. Las reevaluaciones genéticas corrigen lecturas anteriores y enfatizan el papel del estatus.
La comparación con Taosi o Liangzhu resalta caminos diferentes hacia la centralización: Shimao proyecta identidad septentrional con anclaje en Yangshao y vínculos con la estepa, pero sin absorberla.
El jade, las tallas y el hueso revelan redes de intercambio duraderas. En términos biológicos, esas rutas no “pegaban” poblaciones, sino ideas, objetos y símbolos.
Las mujeres en posiciones altas desestabilizan una lectura puramente patriarcal; confirman que la élite admitió excepciones bajo reglas patrilineales.
Con pedigríes de cuatro generaciones, Shimao aporta una resolución fina poco común fuera de Eurasia occidental; su “firma” invita a reexaminar otras urbes tempranas con el mismo rigor.
En suma, Shimao es un nodo temprano de poder, donde linaje y símbolo fueron engranajes de un mismo mecanismo urbano.
Nature
Para la academia internacional, el caso nutre debates sobre si el Estado surge por demografía, intercambio o ideología. Shimao inclina la balanza hacia parentesco e iconografía como tecnologías políticas.
China promueve su protección y divulgación, con nuevos hallazgos, como cementerios nobles y relatos museográficos que conectan pasado y presente.
Shimao enseña que las primeras ciudades no solo concentraron gente, sino también apellidos, símbolos y narrativas de poder. Con más ADN por secuenciar, su historia recién empieza.
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