El precio del café en Colombia llega a $2.966.000, ofreciendo una leve mejora para los caficultores en medio de un panorama de altos costos.
El 10 de noviembre, la Federación Nacional de Cafeteros (FNC) fijó el precio de la carga de café en $2.966.000, un repunte que trae aire fresco a los caficultores colombianos. Sin embargo, aunque el alza es bienvenida, la situación económica sigue siendo compleja para los productores debido a los elevados costos de producción.
El precio de la pasilla, que se mantiene estable en $10.000 por kilo, no ofrece suficiente compensación para cubrir los altos costos operativos de los cafetales. El impacto de los precios internacionales, como el cierre de la Bolsa de Nueva York en 414,75 c/lb, se ve reflejado en el precio interno, pero el alto costo de insumos como fertilizantes y el costo de mano de obra continúan siendo una presión considerable.
Los analistas aseguran que este aumento de precio responde a varios factores, entre ellos la estabilidad en la oferta debido a la cosecha tardía de Brasil y las condiciones climáticas en Asia que afectan la producción. A pesar de la ligera mejora en los precios, los expertos recomiendan a los caficultores vender de forma escalonada para asegurarse de maximizar las ganancias en lo que podría ser un mercado volátil.
El aumento también tiene implicaciones para los consumidores, ya que cualquier alza en el precio de la materia prima eventualmente se traduce en un ajuste en los precios de venta del café en supermercados y cafeterías. Sin embargo, el impacto en el retail puede no ser inmediato, debido a los contratos a largo plazo que muchas empresas mantienen con los proveedores de café.